En 1997 se llevó a cabo las finales de la NBA entre los Chicago Bulls y el Jazz de Utah y en donde el equipo el equipo de Michael Jordan se llevó el campeonato. Pero uno de los momentos que más recuerda los fans fue el quinto juego y es que Jordan lo disputó con gripe y temperatura, a pesar de que no se podía parar unas horas antes, y que terminó el juego en los brazos de Pippen.
Ahora Mitchell & Ness ha decidido rendirle un tributo a ese juego trayendo de vuelta los jerseys de esas finales y que podrán adquirir a partir del 10 de Junio.