Las películas mexicanas han logrado posicionarse dentro de los más importantes Festivales de Cine internacionales como el de Toronto donde la película «Las Niñas Bien», adaptación del libro de Guadalupe Loaeza tuvo su premier mundial.
La escritora Guadalupe Loaeza a lo largo de su trayectoria ha señalado y ha puesto al desnudo a las esferas altas de la sociedad mexicana y uno de los libros es «Las Niñas Bien», escrito en 1982 en la primera crisis económica del país volviéndose una parte aguas en la sociedad. Es la primera vez que se adapta un libro de la escritora.
La elegante, encantadora y perfecta Sofía, líder del grupo de amigas del club de tenis, se enfrenta a lo inimaginable: su caída social. Sofía intentará mantener las apariencias, pero su derrumbe, además de ser inevitable, dará cuenta de qué es lo que se pierde cuando se pierde el dinero.
Tal vez al verla les parezca simple y banal pero lo importante está en los detalles de cada personaje, desde la ropa perfectamente seleccionada, como los accesorios, hasta cada uno de los gestos y las palabras que no se dicen van adelantando como poco a poco Sofía, y su entorno se va transformando hasta dejarla fuera.
¿Cómo llega la historia a tus manos?
AM: A través de Rodrigo y Rafael Ley me llega la idea sobre trabajar los textos de Guadalupe Loaeza, nunca me imagine adoptar un libro y fue un reto sobre hablar de la élite y de las crisis económicas, para dar un panorama de un ámbito más amplio que nos atraviesa como sociedad.
Además de ver la infantilización de una persona como si estuvieran condenas a ser niñas, ser dependientes, y tratar de entender las relaciones entre los matrimonios, como formamos parejas, aún se presenta en las élites que las mujeres aún renuncian a muchas cosas y hay mujeres que pierden o sede el derecho y volverse un objeto más.
¿Porque ir al pasado para hacer películas?
AM: Estamos ante la incertidumbre total por eso vemos para atrás y entender que está pasando. Se me hacía atractivo hacerla porque sucede en el 82 es la primera crisis y después nos acostumbramos al tipo de situación política y que ha durado.
¿Cómo lograron que Guadalupe Loaeza diera los derechos?
R: Guadalupe Loaeza no había querido compartir los derechos de ningún libro, cuando conoció al cast sintió que ya era algo serio, su más grande miedo era que los personajes no se tomaran en serio. Guadalupe siempre estaba trabajando con las actrices.
La película transcurre desde lo más glamoroso, casual en un club exclusivo, un funeral hasta un comida casual, pero muy lejos de tener sentido del humor todo se muestra con la sensación de angustia.
Gaby: Ese era el trabajo hablar de lo qué pasa en las clases altas sin reírnos, al escuchar el título no era llegar a una comedia y ver cómo les afecta a la clase alta. Es una mirada que nunca se había hecho. Se logró una historia muy honesta, sin pretensiones. Creemos en la pariedad, estéticamente fue trabajo de equipo. Es tiempo de pensar estas historias que siguen siendo titulares muy similares a los 80s.
Como publico ayuda a reflexionar a la distancia. A la hora de poder decir “se parece a” como vivimos con esta vorágine de estrés es difícil mirarlo, puede funcionar la retrospectiva.