Tenacidad, mística y noción del género canción, son algunos de los elementos constantes en la obra de esta icónica banda. Y ahora toca homenajear a la noche como reducto donde reside el arte y también la belleza.
Con una oda a esas sombras que supieron envolver algunas de las expresiones artísticas que emergieron y marcaron una era, Los Látigos vuelven a rockear. Y para hacerlo, enuncian desde la experiencia, pero también desde ese constante pulso de novedad que los llevó a conquistar la región.
Con sobriedad y soltura, la canción combina nostalgia con una noción de futuro poderosa: lo que viene muy posiblemente sea aún mejor.
Los Látigos también regresarán a los escenarios el próximo 7 de octubre en el icónico Teatro Vorterix en Argentina.
Pronto se anunciarán más fechas de su gira de reunión y esperemos una sorpresa para México.